La comercialización es uno de los principales problemas de los productos agropecuarios. Dentro de la ganadería bovina de doble propósito, que se desarrolla principalmente en los trópicos, se le da mayor importancia al becerro en comparación con la producción de la leche.
En este sentido, para mejorar la rentabilidad de la empresa resulta vital dar valor agregado a la leche producida en el doble propósito mediante la elaboración de productos y subproductos lácteos. Es una oportunidad para generar ingresos alternativos.
Desde el punto de vista nutricional, los productos lácteos se caracterizan en general por la gran cantidad de calcio, proteínas de alta calidad, vitaminas A y D. Sirven para prevenir enfermedades cuyos efectos son una deficiencia de calcio e igualmente son fuentes de potasio.
En algunos estudios se ha podido comprobar que el consumo de proteínas de la leche (caseína) puede reducir la hipertensión arterial así como un fortalecimiento de las paredes del intestino delgado, lo que redunda en una mejora de la salud.
Considerando lo anterior, la estructuración de un proyecto para generar productos y subproductos con base en leche, ofrece una excelente opción para evitar la problemática de comercialización de leche producida en la actividad bovino doble propósito, generar certidumbre y una herramienta clave para tener con éxito proyectos en ganadería.
Al respecto, algunos de los aspectos que se deben considerar antes de emprender un proyecto de estas características son:
1) Verificar la aceptación en el mercado.
2) El precio de la leche sin procesar equivale aproximadamente a una tercera parte del precio que se puede obtener al transformar la leche fluida en productos y subproductos.
3) A través de estos proyectos se puede tener un impacto significativo en la generación de empleo rural en general y familiar en particular.
Sin embargo, la variable más importante para el inicio en la elaboración de productos lácteos es la capacitación para poder transformar la leche considerada como bronca, en productos terminados como quesos asaderos, panela, cotija, así como yogures, cajetas, rompopes, gelatinas, entre otros.
*Felipe Pacheco Facio es jefe de Departamento en el Centro de Desarrollo Tecnológico La Noria. La opinión es del autor y no necesariamente coincide con el punto de vista oficial de FIRA.
