Por los costos, en las empresas creen que el Gobierno debe ser más flexible En la industria lechera tienen una certeza: los aumentos de precios que autorizó el Gobierno hasta el momento no cubren sus costos. Por eso, en el sector comenzaron a advertir que debe haber una actualización mayor en sus valores. Desde diciembre, el costo industrial en este rubro aumentó un 22% en promedio.
Es un dato que aportó Miguel Paulón, presidente del Centro de la Industria Lechera (CIL). En ese indicador entra la leche pagada al productor -que subió 27,8% entre diciembre de 2013 y abril pasado, para tocar los $ 2,94 el litro-, la mano de obra, los fletes y la distribución de productos. Contra ese 22% de suba, “un par de empresas” recibieron la aprobación para aplicar dos aumentos de 4% en promedio para sus productos a salida de fábrica, mientras que una gran parte la tuvo sólo para un incremento (de la misma magnitud). Cada empresa negocia por su cuenta con la Secretaría de Comercio.
“Estos aumentos están lejos de cubrir los costos”, apuntó un vocero de la industria que pidió reserva de su nombre. Otro vocero indicó que, con gestos y señales, el Gobierno viene haciendo lo posible para evitar nuevas subas que terminen repercutiendo en el público. “Hasta el momento dejaron aumentar poco y lo autorizaron tarde, dos meses después.
Dieron 4 por ciento, cuando tendría que haber sido entre un 12 y 14 por ciento”, contó otra fuente empresaria. “No alcanza. Hubo aumentos de energía, de materia prima y aún no arrancó la paritaria con el gremio”, agregó. Otro vocero señaló: “El aumento llegó demorado. Ayudó, pero no es lo ideal, porque se había pedido más. En las industrias los costos aumentan, pero no se puede subir mucho a salida de fábrica”.
EN ROJO Si se observan los números de las dos grandes empresas del rubro, Sancor y La Serenísima, se aprecia que atraviesan un escenario complicado. En el primer trimestre de 2014, Sancor perdió $ 95,8 millones, en tanto que Mastellone Hermanos (La Serenísima) tuvo un rojo de $ 160,2 millones, diez veces más que en el mismo período del año pasado. Sancor y La Serenísima ya vienen arrastrando una situación difícil. Al 30 de junio de 2013, la primera cerró su balance anual con una pérdida de $ 305,8 millones tras haber ganado $ 764,8 millones al 30 de junio de 2012.
Mastellone, en tanto, tuvo un rojo de $ 57,8 millones en 2013 y de $ 115,5 millones en 2012. Por otra parte, los tamberos, que denuncian que la Secretaría de Comercio quiere congelarles el precio en $ 3, hoy se reunirán para analizar una estrategia común. “Esto es una tomada de pelo”, dijo Carlos Brave, coordinador de la Mesa Nacional de Productores de Leche, sobre la supuesta movida de Comercio.