Hoy Colombia está incorporada a la economía mundial y por tal razón es que nos da tos cuando a un chino le da gripa, o nos da fiebre cuando a un inglés le da el mal de la vaca loca. Al tener el valor del litro de leche en Argentina o Nueva Zelandia a unos $600 el litro, no nos queda más alternativa que vender la leche a ese precio, de lo contrario no tendremos comprador.
Lo que más me duele en este caso es que le hemos dado la espalda a Centro América y a México donde tendríamos el mercado para enviarles tanto carne como leche.
Olvidémonos del mercado venezolano, pues si la devaluación no fue sino subir el “bolo” de 4,30 a 6,30 por dólar, nada se hace, pues en el mercado negro veneco el dólar está por los 20 bolos, y ellos le compran a sus copartidarios del socialismo del siglo XXI, representados en Argentina o Brasil, manejados por dos mujeres chavistas. El solo México importa 400 mil toneladas de carne e igual cantidad de leche en polvo, provenientes de Canadá o USA.
Es triste ver que nos está pasando, hoy tenemos lo mismo que hace 20 años, pero antes teníamos un presupuesto o ingresos que nos permitían vivir con holgura, pero hoy las cosas son a otro precio, ya la platica que le damos a nuestras esposas no alcanza para un buen mercado y eso de cambiar de carro cada dos años pasó a mejor vida. Ya tenemos que aplicar aquel dicho: el que no más tiene, con su mujer se acuesta. Es decir, en plata blanca tenemos lo mismo, pero estamos más pobres. Tenemos que dar un fuerte viraje a nuestras actividades pecuarias, pues las agrícolas este gobierno las terminó.
He visto que en el Atlántico tienen ganaderías debidamente explotadas, con vacas FL de cebú con pardo, con producciones promedio de ocho litros diarios y lactancias de 250 días, es decir, lactancias de dos mil litros, que a $600, serían un millón 200 mil pesos, más la cría en cada parto.
Vimos cómo en la venta de La Victoriana quedó sin vender buen número de novillas de extraordinaria genética, que bien pueden dar lactancias similares a la anteriormente plasmada, Fl de Hostein, Jersey o Normando, con base en dos millones de pesos por cabeza, que es un precio por debajo del justo para este tipo de ejemplares. Tenemos que tener silo o heno para suplementar el ganado en el tiempo seco y es también primordial el suministro de una buena agua, que su calidad deber ser la que usted pueda beber tranquilamente.
Otra cosa que necesitamos es una verdadera cooperativa de productores, pues Codelac es una cooperativa elitista, para adinerados, ¿quién puede invertir 20 millones de pesos para ser socio de la misma? Se puede pensar en varias cooperativas zonales, con cubrimientos de dos o tres municipios, para poder procesar unos 30 mililitros diarios y tener una producción multifacética para buscar mejores ingresos.
Sé que algunos se molestan, en especial Toño Sánchez, que no ve sino diablos en las cosas de los cachacos, con el caso de Colanta, de la cual fui asesor tributario desde su inicio, hasta los 30 años, ad-honorem. Jenaro inició cobrando $10 por cada litro de leche y hoy tenemos que esa cooperativa le da proceso industrial a unos dos y medio millones de litros y sus productos son de gran aceptación, tanto interna como externamente, pues hace cerca de 10 años que exporta al difícil mercado gringo.
Dejemos nuestro egoísmo y nuestra individualidad, asociémonos como se hizo en Antioquia a partir de los años 20 del siglo pasado con la sociedad anónima que sí lo fue verdaderamente. Pero en el gobierno de López Michelsen las sociedades anónimas pasaron a ser sociedades de amigos, y bien lo decía él, que Colombia era propiedad de 32 familias, dentro de las cuales estaba la suya. Y para la muestra un botón: la hacienda La Libertad, que para desembotellarla le hicieron la ruta alterna a los llanos, y así valorizar sus 30 mil hectáreas.
Hagamos algo positivo en nuestro favor o la desidia y pereza nos llevará a la ruina.
Por Ramiro Vélez Toro
